• Posted by : Unknown 2 abr 2014

    Capitulo Anterior: Decisiones Parte 4



    A la mañana siguiente, todo transcurrió con completa normalidad.

    A la hora del desayuno, nos encontrábamos los miembros de la familia manteniendo una conversación amena. Minato como Fugaku se los veía felices, seguramente la habían pasado bastante bien durante todo su viaje de vuelta, Naruko trataba continuamente de hablar con Sasuke a lo que el contestaba con simples monosílabos.

    Se los veía tensos, lo cual produjo en mi interior una gran sonrisa de satisfacción.

    Al contrario de lo que creía, mi hermana se comporto hacia mí como cualquier mañana normal, seguramente lo hacía para no levantar sospecha alguna de lo sucedido el sábado en mi cuarto, generando un desconocido sentimiento de traición hacia ella.

    No la comprendía, primero me trataba como si fuera algo valioso, luego como algo descartable y, por último, como alguna especie de carga.

    ¿En qué momento había cambiado tanto nuestra relación?

    Sasuke no me había dirigido la mirada, en ningún momento, logrando que un sentimiento de  victoria se apoderara de mi ser.

    Minato deja de hablar con Fugaku desviando sus ojos hacia mi dirección.

    -Naruto ¿Cómo la pasaste en la casa de tu amigo? – tanto yo como Sasuke nos observamos, intercambiando miradas, el que yo me fuera a dormir en otro lugar durante esos días debía mantenerse en secreto ¿Cómo era que él lo sabía? Y, según la reacción del bastardo, pude deducir que él no se lo había dicho tampoco – es la primera vez que te quedas a dormir en la casa de alguien ¡preséntalo algún día! – trate de tranquilizarme para enfrentar la mirada de Minato, si él veía algún tipo de vacilación de mi parte, seguramente sospecharía que algo estaba mal.

    -ok, uno de estos días lo traigo – sonrió alegremente – su nombre es Gaara-Chan, lo conocí hace unas semanas en la escuela, es un buen tipo, aunque algo callado – comienzo a reír divertido.

    -¿y que estuvieron haciendo? - ¿Por qué mi padre debía ser tan curioso?

    -nada en especial, conocí a varias personas que también se quedaron a dormir en su casa, paseamos por la zona, escuchamos música, miramos películas, lo normal – me encogí de hombros de forma despreocupada

     -seguramente debes de apreciar mucho a tu amigo como para quedarte a dormir durante tantos días seguidos – Sasuke enfatizo la palabra “Apreciar” de manera desagradable, dejándome muy en claro su disconformidad y molestia. Mi hermana lo observo de forma extraña, yo simplemente sonreí.

    -sí, somos MUY unidos – su rostro comenzó a demostrar lentamente la molestia que le provocaba mi situación actual – de hecho, es muy probable que, cuando salga de la escuela, me valla para su casa – el levanto una ceja.

    -espero que la pases bien, pero recuerda de no llegar muy tarde – yo le sonreí a Minato por su comentario.

    -No te preocupes, no lo haré – el correspondió mi sonrisa.

    Al terminar mi almuerzo, me levante de la silla, dedicándoles una sonrisa a todos los allí presentes.
    -Bueno, yo ya me voy yendo –

    -¿Por qué no te quedas un rato mas así se van todos juntos? – voltee sorprendido al escuchar la voz de Fugaku dirigirse hacia mi persona, esto, sin lugar a dudas, era algo verdaderamente extraño de su parte. El se encontraba nervioso, y levemente sonrojado, lo que me hizo cambiar mi perspectiva hacia su persona. Seguramente, Fugaku, era alguien tímido, pero físicamente no lo demuestra (aunque esto es simplemente una pequeña suposición mía)

    Yo sonreí.

    -prefiero irme caminando, a pesar de que tardo un poco más que ellos, no estoy acostumbrado a que me vengan a buscar y me retiren en auto – le estaba siendo, en cierta forma, bastante sincero, a pesar de tener otros sentimientos ocultos, pero aun así, creía que esa escusa seria más que suficiente. Lo cual fue confirmado cuando el asintió con la cabeza.

    -lo entiendo, pero recuerda que si se te hace tarde, no dudes en irte con ellos – yo sonreí como respuesta, retirándome del lugar.

    -¡espera Naruto! – mi hermana comenzó a perseguirme hasta agarrar mi muñeca derecha, provocando que yo, por auto reflejo, la apartara bruscamente. Ya que por un segundo, tuve miedo de que ella se diera cuenta de mis heridas. Naruko simplemente se paralizo, no la culpo, por lo general, yo no era rudo con ella. Pero, el tan solo recordar el que tuviera sexo en mi cama, mas el miedo que me generaba que se enterara de lo que hice este fin de semana, eran cosas las cuales provocaban que mi cuerpo actuara contra mi voluntad.

    -perdóname, simplemente fue un reflejo – logre sonreírle, disminuyendo, de esa forma, la tensión en el ambiente. Como agradecía que nos encontráramos ya fuera del comedor.

    -no importa, tan solo, yo quería preguntarte un par de cosas - ¿acaso esto es a lo que las personas llaman “Ironías de la Vida”? a pesar de que debería ser yo quien la interrogara completamente, Naruko venia como si tuviera el derecho de hacerlo. Esta relación se estaba volviendo demasiado retorcida para mi gusto.

    -¡Claro! Pero entonces ¿Por qué no nos vamos hacia el living? No tengo mucho tiempo para hablar – ella sonrió.

    -solo serán 10 minutos ¡no te preocupes! – caminamos tranquilamente a través de los pasillos, ella lo hacia delante mío de forma despreocupada, y yo observando detalladamente su espalda. Era increíble como el aprecio podía convertirse en una sensación tan desagradable. Al llegar, ella cerró la puerta, mientras que comprobábamos con la mirada el que no hubiera alguna persona por los alrededores.

    Nos miramos mutuamente a los ojos.

    -primero te quería preguntar – hizo una pequeña pausa – vos y Sasuke ¿hablaron de algo importante durante la noche? – sonreí a mis adentros ¿desde cuándo Naruko se había vuelto tan observadora?

    -¿Por qué? – no ocultaría mi intriga, quería ver sus verdaderos motivos.

    -ayer a la noche, Sasuke estaba muy alterado ¡siquiera podía estar a su lado! Nunca lo había visto de esa forma, entonces pensé que tu tenias algo que ver en esto – yo me encogí de hombros.

    -no lo sé, el paso por mi habitación diciendo que te saludara porque estabas preocupada por mí, pero yo al decirle que estaba cansado pateo mi puerta y se fue – era obvio que eso era mentira, pero ella no lo sabía, y no quería que lo supiera. No tenía derecho a saber la verdad, a pesar de que sería muy interesante el que ella se enterara.

    -ya veo, la verdad es que si, estaba preocupada, pero nuca creí que Sasuke te recriminaría eso – ella comenzó a irradiar felicidad a su alrededor – el es tan amable y considerado conmigo – ese dolor tan conocido para mi comenzó a palpitar en mi pecho, para luego tranquilizarse, ella simplemente se estaba dejando llevar por una mentira mía, no había razón alguna para que yo me sintiera mal por eso.

    -¿y? ¿La otra pregunta? – la estaba apurando, no quería estar demasiado tiempo a su lado.

    -¡Ha! Si…. Otra cosa que te quería decir era…. – su rostro se torno serio – Naruto, creo que deberías dejar de juntarte tanto con Sabaku – yo la observaba incrédulo a sus palabras recién dichas ¿Qué no me juntara con Gaara? ¡Quien le daba derecho a opinar sobre con quien debo juntarme y con quien no! – pienso que él te traerá muchos problemas, después de todo, seguramente ya conoces los rumores – no podía estar hablándome en serio – como que Sabaku está metido con la mafia, o que él se prostituye por placer – nuestras miradas se cruzaron por un segundo, provocando que ella se tensara y comenzara a temblar, después de todo, yo estaba muy molesto por sus hirientes palabras ¿Cómo podía hablar así de alguien que siquiera conocía?.

    -esos son solo rumores, además, Gaara-Chan es una muy buena persona – la mire de forma despectiva – es una lástima que alguien como tú nunca pueda entenderlo – pase a su lado, abriendo la puerta – otra cosa – mi tono de vos cambio a uno alegre - ¿Cómo la pasaste este fin de semana a solas con Sasuke? – Ella se sonrojo desviando la mirada – ok, les deseo lo mejor – y, dicho esto, Salí del living mientras me sumergía en mis propios pensamientos.

    Exactamente ¿en qué momento comenzaron a nacer estos sentimientos de desprecio hacia ella?


    -.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.


    Había faltado a las primeras 2 horas de clase, no porque hubiera llegado tarde, al contrario (me sobraron 5 minutos), sino que, en ese momento, no quería tener contacto alguno con nadie, ni siquiera conmigo mismo.

    Estaba acostado mirando las nubes pasar, esta era una terapia que usaba para relajarme.

    -Últimamente te veo mucho por aquí – me asuste al escuchar la repentina voz, la cual desconocía su propietario, comenzó a observar cuidadosamente mi alrededor, sorprendiéndome al no ver a nadie ¿a caso me estaba volviendo loco? – Acá arriba – levante mi mirada hacia la parte superior de la entrada para encontrar a la persona en cuestión. Esta se trataba de un joven, que calculaba yo, debía de tener mi edad, ojos oscuros, pelo atado en una coleta la cual terminaba en picos, un poco más oscuro que sus ojos. Se lo veía despreocupado, como si no tuviera nada más que hacer.

    -¿Qué haces ahí? O mejor dicho ¿Cómo llegaste a ese lugar? – el me miro sorprendido, para luego reír - ¿Qué es tan gracioso? – me sentía levemente ofendido, era un completo desconocido y sentía como si se estuviera burlando de mi.

    -nada, me parece raro que una persona que venga seguido a la azotea de la escuela no sepa que hay una escalera para subir a este lugar – el señalo a su derecha, confirmándome que si, si había una. Nunca me sentí tan estúpido (o colgado) en toda mi vida ¿Cómo no había podido verla? – Al parecer eres alguien problemático –

    -¿problemático? ¿A qué te refieres con eso? Además, todavía no me respondiste ¿Qué hacías ahí arriba? – el suspiro.

    -sí que eres problemático, estaba haciendo lo mismo que vos hace unos minutos, mirando las nubes – lo miraba desorientado.

    -¿las nubes? –

    -sí, las nubes – hubo un pequeño silencio, esta persona ¿realmente me estaba hablando en serio? – Cuando las veo, no puedo evitar sentirme tranquilo, como si flotara, olvidando todas mis preocupaciones o pensamientos – yo simplemente lo observaba, prestándole atención a cada unas de sus palabras, por supuesto, podía entender perfectamente cómo se sentía.

    -ne, puedo mirar las nubes allá arriba – él se sorprendió.

    -sí, claro, no le veo el problema – yo sonreí complacido, para a continuación, subir las escaleras, observándolo detenidamente.

    Al juzgar por su contextura, podía confirmar que se trataba de mi edad, y no solo eso, esa corbata roja la cual resaltaba de su uniforme escolar negro me había permitido darme cuenta de algo sumamente importante.

    -tú, estas en la clase S – el suspiro.

    -sí, una muy problemática, desearía poder volver a la clase A – yo reí divertido, acostándome a su lado, mientras ambos observábamos las nubes pasar.

    -mi nombre es Naruto, Uzumaki Naruto ¿y vos? –

    -Nara Shikamaru –

    El silencio se apodero del ambiente, uno cálido y reconfortante, realmente, observar las nubes era algo completamente tranquilizante.

    -Naruto – yo lo mire – vos sos el hermano de Naruko ¿verdad? – estaba intrigado ¿a qué venía esa obvia pregunta?

    -sí, somos gemelos –

    -ya veo…. ¿sabes? Me caes mucho mejor vos que tu hermana, como decirlo, se parecen, pero son completamente diferentes – yo sonreí abiertamente, era la primera vez que alguien me decía que prefería estar con migo en vez de con mi hermana – aunque ambos son problemáticos – yo reí incómodamente, aun no lograba entender su significado de “Problemático”.

    -Shikamaru ¿puedo llamarte asi? – el asintió - ¿Por qué dijiste que últimamente me veías mucho por aquí? – el suspiro.

    -porque es la verdad – volvió a mirar las nubes pasar – cada vez que estoy durmiendo o descansando siempre te encuentro en la azotea – estaba nervioso ¿Qué aria si él hubiera escuchado alguna de mis conversaciones con Gaara? No, seguramente ya las había escuchado – y cuando viene tu amigo del tatuaje se ponen a hablar de cosas raras, son demasiado problemáticos – si, lo sabía, había escuchado cada una de mis conversaciones con él, mis manos comenzaron a sudar de los nervios y mi corazón se aceleraba – pero no te preocupes, no diré nada, sería muy problemático hacerlo - ¿me estaría hablando en serio? Acaso yo ¿podría confiar en él?

    -¿de verdad? – el me miro, para luego sonreírme.

    -no lo voy a hacer – estaba un poco aliviado, pero la duda y preocupación aun permanecía en mi mente.

    Nos quedamos observando las nubes pasar durante horas, logrando que, sin darme cuenta, terminara durmiéndome en ese lugar.


    Si seguía durmiéndome en vez de ir a clase, seguramente lo lamentaría en la época de exámenes.


    Capitulo Anterior:Capitulo Anterior: Decisiones Parte 4

    0 comentarios

  • Copyright © 2013 - Nisekoi - All Right Reserved

    Zatsiel Powered by Blogger - Designed by Johanes Djogan